La historia petrolera de Venezuela es muy simple – Miguel Rodríguez

Por: Miguel Rodríguez

Nuestro petróleo ha sido, es , y será siempre propiedad de la Nación y el Estado venezolano.

La Standard Oil (Exxon) americana, la Shell Anglo-Neerlandesa, y otras compañias extranjeras vinieron a un país miserable, palúdico y analfabeta, bajo un régimen de concesiones a desarrollar la producción petrolera en nuestro país. Jamás recibieron propiedades sobre el petroleo en el subsuelo, sino sobre el crudo producido en la boca del pozo, sobre el que tenían que pagar una importante creciente Regalía y los correspondientes impuestos sobre la renta sobre sus ganancias.

Jamás el petroleo venezolano en el subsuelo ha sido propiedad de las empresas transnacionales!!!

El sistema funcionó muy bien hasta 1970 cuando el país llegó a producir casi 4 millones de b/d de petroleo. En 1960 acabando de terminar la dictadura de Pérez Jimenez e iniciándose el período democrático, Venezuela era el primer exportador Mundial de petroleo, y el segundo productor Mundial solo superada por USA. Ya producía 3 millones de b/d, el doble de Arabia Saudita y el triple de Rusia!

Ese exitosísimo proceso de Desarrollo petrolero y como país sufre un quiebre dramático con el disparate de la Democracia venezolana de la aprobación de la Ley de Reversión en 1969, que revertía al Estado todos los activos productivos y concesiones de las transnacionales hacia 1983. La catástrofe no se hizo esperar. Las transnacionales declararon una huelga de inversiones que colapsó la producción petrolera de Venezuela. En 1974 el nuevo Gobierno de Carlos Andrés Pérez recibió la mitad de la producción de 1970, lo cual lo obligó a adelantar la estatización-Nacionalización de la producción petrolera para enero de 1976.
Lo hizo de manera brillante, creando a PDVSA como un Holding, y reemplazando à la Exxon (Creole) por la operadora Lagoven, à la Shell por Maraven y à la CVP en Corpoven.
Para ello encargó al mejor gerente de Venezuela, el General Rafael Alfonzo Ravard y a lo mejor de la gerencia petrolera venezolana a montar una de las mejores corporaciones de este planeta.

Pero a Mr. Trump (Mr. Danger lo llamaría Rómulo Gallegos) le convendría enterarse de algo fundamental. En esta extraordinaria nacionalizacion de Carlos Andrés Pérez en 1976 no hubo expropiaciones, sino negociaciones y PAGO, por los activos de las transnacionales del pozo para afuera y por el valor de su negocio.

Además, la participación futura de las transnacionales en el negocio petrolero quedó abierta por la aprobación del artículo 5 en la Ley de Nacionalización, redactado por un joven brillante Senador del Congreso de la República, Andrés Sosa Pietri , quien posteriormente se convertiría en el mejor Presidente de la historia de PDVSA junto al General Ravard, en el segundo Gobierno de Carlos Andrés Pérez.

Es bueno saber, que de no haber sido por la Guerra del Yom Kippur que derivó en la quintuplicación de los precios del petroleo en 1973-74, el primer Gobierno de Carlos Andrés Pérez no hubiera producido ninguna bonanza, sino miseria y pobreza por el colapso en la producción petrolera de 1970 en adelante.

La actuación de Venezuela como pais petrolero, y de PDVSA y sus filiales después de la Nacionalización fué mediocre durante 15 años, no por la gran empresa, sino por la mojigata política que se originaba en el Ministerio de Energía y Minas, basada en la estúpidez del “excremento del diablo”, cuando en realidad el petroleo es una bendición de Dios para los países con altas reservas como lo ha demostrado el inmenso desarrollo de los países petroleros hasta hoy, con la excepción de Venezuela, Iran, Irak y Libia, siempre por razones políticas y pésimos manejos de sus economias. Esa visión pacata de puro OPEP con esteroides, llevó a PDVSA a aceptar recortes en su producción en los pésimos gobiernos de Luis Herrera y Jaime Lusinchi , mientras los países árabes olfateando la estupidez de los políticos venezolanos, continuation aumentando extraordinariamente su producción de petroleo y gas a costillas del país con las mayores reservas petroleras mundiales, Venezuela! Rusia también comenzó a ocupar el espacio productivo petrolero venezolano, olfateando la enfermedad de nuestro sector político.

Esta “Marcha de la Estupidez” la rompimos en el segundo Gobierno de Carlos Andrés Pérez, con el programa del Gran Viraje y la llegada en 1990 de Andrés Sosa Pietri a la Presidencia de PDVSA. En sus dos años y medio en PDVSA de 1990 a 1992, se logra aumentar su producción en 1 millón de barriles diarios, como hecho insólito en toda la historia de la empresa, desde 1976 hasta su debacle de estos años del chavismo hasta hoy.
Andrés Sosa diseña e implementa junto a una revitalizada PDVSA, el programa de Apertura Petrolera, invitando nuevamente a las grandes empresas petroleras (Exxon-Mobil, Shell et.al.) en asociación con PDVSA, a participar en el mayor programa de expansión de la producción petrolera Mundial que iba a tener lugar en Venezuela. El Plan era alcanzar 6-7 millones de b/d en el año 2000, y 10 millones de b/d en la primera década del Siglo XXI.

Junto a las políticas del Gran Viraje, Venezuela sería como los países petroleros del Golfo o Noruega un país plenamente desarrollado hoy.

La gran tragedia de Venezuela, de su Economía, de su Democracia y de su sector Petrolero en estos últimos 30 años se da por la ignorancia, torpeza y avidez de sus élites políticas y privadas, que defenestran al gran político de Venezuela Carlos Andrés Pérez en 1992-93, en un país que ya habia sido el de mas alto crecimiento en el mundo en 1991, para producir el catastrófico Gobierno de Rafael Caldera, que encarcela al gran Demócrata, y libera al traidor, golpista y mamarracho del 4 de Febrero, y se lo llevan de la mano a Miraflores para producir la hecatombe de la cubanización de Venezuela en estas tres décadas hasta hoy.

Las expropiaciones de todas las empresas venezolanas y extranjeras, incluyendo las asociaciones extratégicas del sector petrolero las hizo Hugo Chávez. Algunas fueron compensadas, otras no. Unas cuantas tienen fallos favorables de Cortes e Instituciones internacionales favorables para ser compensadas.

Como Mr. Trump conoce perfectamente por su vasta experiencia personal en sus quiebras empresariales, una empresa que no puede pagar va en USA a Chapter 11 a que la administre un Tribunal, a ver si la salva una nueva Administración, o quiebra definitivamente, y los dueños y los acreedores pierden todo.

Venezuela hoy en el 2025 es un país en absoluta quiebra, económica, política y moral. Se ha regresado 100 años a 1925 cuando era el país hambriento, miserable y palúdico de Las Casas Muertas…

Venezuela no puede pagar un centavo de deuda en los próximos cinco años, sino a costa del hambre de sus hijos.
Lo que si puede Venezuela, no con el robo de su territorio a cañonazos como en la Guerra Mexicana de 1846, sino bajo una nueva Administración venezolana competente y especialmente honesta, es reconstruír de manera muy potente su Economía y sus instituciones democraticas, a través de una total apertura de la economía y de su sector petrolero. Con unos Estados Unidos aliados comprometidos en su total recuperación y Desarrollo! Pero en total libertad de relacionarse economica y políticamente con todos los países del planeta que puedan contribuír con su bienestar.

Venezuela is in Chapter 11, President Trump!!

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post recientes