Cuando hablamos de ese soneo, de voz atiplada, muy alta, con una sonoridad nasal, casi como una trompeta altisonante pero sordinada, estamos refiriéndonos a una manera clásica del soneo cubano.
Miguel Quintana Monguito, en definitiva, no hacía más que seguir la batuta que ya había marcado Miguelito Cuní.
Miguelito Cuní logró su reinado en el son cubano con el respaldo de la orquesta de Chappottín. Una vez Arsenio Rodríguez parte hacia Nueva York, Chappottín junto a Lilí Martínez queda al frente de la misma orquesta, del mismo conjunto… Y gracias a Miguelito Cuní logran imponer un estilo determinante para el son, ejemplo de ello La mujer celosa.
Un comentario
he escuchado mucha música de esto dos maestro de verdad que son buenísimo y profesionales en lo que hacen recomiendo el vídeo de nostalgia cubana que bueno tiempo cada e´poca es buena para el que la vive donde se lucen con el carbonero como añoro aquellos carnavales no vuelven saludos desde maracaibo venezuela