Publicado en: Prodavinci
Por: Mari Montes
Una vez me contó que desde niño narraba los jonrones de la misma forma que lo hace ahora, rogando a Dios que a nadie se le ocurriera, antes que a él, describirlos así.
Como un novato en círculo de espera, soñaba con que le llegara el turno.
“Va batazo grande por el jardín derecho atrás, atrás, atrás… ¡Enorrrrmee! ¡¡¡Ooooooooooooooooooooooooooolvídenloooo!!!, cuadrangular de Bob Abreu…”
Es que hay tantas maneras de narrar un jonrón como narradores existen. La descripción del batazo, de la pelota abandonando el parque, se convierte en el sello de cada uno.
“Cada cual en este mundo cuenta el cuento a su manera”, canta La Lupe, verso aplicable a los narradores. Cada cual con su estilo y palabras para llevar el juego de béisbol a la audiencia.
Sus frases y expresiones salen también del terreno y las usamos, especialmente entre fanáticos de la pelota, cuando nos parece pertinente.
“¡Qué incómodo!”
Creo que si hacemos una encuesta entre los fanáticos de los Leones de Caracas para determinar quién es “La voz” de todos los tiempos, después de Delio Amado León, la mención es para Fernando Arreaza. Eso que él llama cariñosamente: “La leal y consecuente legión caraquista”.
“Prepara su próximo lanzamiento, ya lo hace…”
Fernando Arreaza se ganó ese lugar en la afición melenuda por su calidad. No buscó ser el sucesor de Delio, le tocó el turno, el relevo generacional y supo ubicarse a la altura del compromiso. En televisión, desde sus inicios, cuando era un jovencito veinteañero que comenzaba a cumplir su sueño de ser narrador, primero en Omnivisión, el primer canal por suscripción que existió en Venezuela, luego en Venevisión y en la radio, cuando Unión Radio se convirtió en el circuito de los Leones del Caracas y Fernando se convirtió en parte del staff.
“Observa cuidadosamente las señas, da un vistazo al corredor de segunda…”
Voces legendarias han sido narradores y comentaristas de los Leones: Pablo Morales y Óscar Prieto, Pancho «Pepe» Cróquer, Víctor Saume, Omar Lares, Daniel Crespo Verona, Delio Amado León, Leo Benítez, Carlos González, Duillio DiGiácomo, Gonzalo López Silvero, Domingo Álvarez, Reyes Medina, Humberto Acosta, Iván Medina, Francisco Blavia, Freddy Chersia y Efrain Zavarce, han sido parte de la vida del equipo y así de su afición, que recuerda momentos descritos por ellos.
Por más de 26 temporadas Fernando Arreaza ha sido tan consecuente como esa legión que lo sigue y aprecia. Es una combinación de sobriedad con emoción. Es un estudioso, se mantiene actualizado sobre las nuevas métricas para analizar el juego, sostiene sus opiniones con argumentos con los que se puede estar o no de acuerdo, basados en la pelota que ha visto y descrito y en las entrevistas que ha hecho a las grandes estrellas del béisbol contemporáneo.
“Tiene dominio y hace la jugada para el segundo out…”
Fernando tomó el testigo, en radio y televisión, de una generación que bien podríamos llamar “Clásicos”, insuperables en la memoria del “béisbol de antes”, el “Old Fashion Baseball” . Las voces que destacaron las jugadas de César Tovar o Víctor Davalillo, los batazos de Antonio Armas o Baudilio Díaz.
“La cuenta llega al límite, tres y dos para Franklin Gutiérrez… ”
Fernando ha narrado en las verdes y en las maduras, en los campeonatos y subcampeonatos que tanto duele. Sus descripciones emocionantes de momentos cumbres están grabadas en la memoria de esa consecuente legión que gracias a la tecnología, puede sintonizarlo desde cualquier parte del mundo, y es una conexión con el equipo de nuestros amores, y así con nuestro particular pedazo de Venezuela que significa el Caracas.
Gracias a él, aunque estemos lejos, nos es posible ver el juego al pie de El Ávila.
“Ya inicia sus movimientos…”
Mi familia es de cuatro: Daniel, mi esposo y yo somos caraquistas; nuestros hijos Daniel y Santiago son guairistas, pero en nuestra casa se escucha el Circuito de Leones cada temporada, así que ellos crecieron oyendo a Fernando y a sus compañeros de transmisión. Además, claro, de disfrutarlo en la televisión.
Fotograma de IVC
“Momento interesante en el juego de béisbol…”
Imaginen ustedes, luego de contarles lo que significa Fernando Arreaza en la historia de la narración deportiva, y en particular de los Leones, la emoción y el orgullo que significa que mi hijo, Daniel Álvarez, esté iniciando su carrera como comentarista de béisbol al lado de un maestro. Y me atrevo a usar esa palabra porque el maestro es el que comparte sus conocimientos con generosidad, el que valora las virtudes de sus discípulos, que fascina al hablar y da luces, interesado en que el otro también tenga luz propia. Ahora hablo como la mamá del novato que ha tenido el privilegio de estar en un staff como el que tiene IVC para transmitir el béisbol.
Hacía tiempo quería dedicar unas líneas a Fernando, sé que montones de caraquistas de la legión y aún más allá coinciden conmigo en los atributos descritos, pero además es mi excusa para darle las gracias por su corazón enorme, como los batazos que ha descrito.
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