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Todos los deportes están llenos de supersticiones. Casi todos los deportistas están llenos de supersticiones. Si algún deporte está lleno de supersticiones ese es el béisbol. Por ejemplo, la fijación que tiene algunos jugadores con sus números que no se les pueden cambiar. Y si se les cambian, algunos llegan a ponerse el número original debajo de la camiseta para que no les vaya tan mal cada vez que salen al terreno.
Otros, si con tal vestimenta le ha ido bien, pues no se la quite, es famosa la anécdota, la he contado varias veces, de un prominente dueño directivo de beisbol de un equipo local. Su equipo se enrachó de manera milagrosa al final de la temporada, pudo pasar milagrosamente del play off a la serie final y terminó alzando con el título. Este directivo no se quitó la ropa ni se bañó durante todos esos largos días, así que nadie se le acercaba, pero él se alzó con su trofeo.
Otra de las supersticiones más recurrentes en el béisbol es las que
tiene que ver con algunas cosas que no se dicen. Por ejemplo, nada más difícil que el no hit, el juego sin hit ni carreras y más aun el juego perfecto. Cuando se está viendo le juego, nadie habla. Entonces uno ve que están pasando los innings y el pitcher sigue intraficable, no le hacen nada. Allí crece la tensión peor mientras más crece la tensión menos se habla. Esa es una tradición que se da en todos los estadios del mundo donde se juegue beisbol, en América Latina, en los Estadios Unidos, en Italia, en Japón. En fin. No se menciona, no lo dicen los comentaristas. De allí una discusión que me toco larga con el muy querido y respetado Beto Perdomo, que en paz descanse.
No lo dicen para nada en las tribunas, solo nos miramos la cara y vemos como va la pizarra. Y mucho menos se dice en el dugout, en el 
terreno de juego. Al pitcher que va en la hazaña no se le acerca nadie para que no se quebrante la concentración. Pues bien, en el segundo juego de la serie mundial entre Los Cachorros y Los Indios, Jake Arrieta estaba lanzando de maravilla, en el sexto inning, ya pasada la mitad del juego estaba todavía en no hit no round, hasta que vinieron los cretinos de la cadena Fox y pusieron en pantalla “No No”, es decir aquí va un No hit no round. Tres lanzamientos después de haber puesto eso en la pantalla le metieron el primer hit a Jake Arrieta. El juego lo ganaron los Cachorros, empataron la serie, pero por favor, a quien se le ocurre.
Hay cosas que hay que respetar. Por ejemplo, las supersticiones en el béisbol.
