Por: Carolina Jaimes Branger
La patria… de los cubanos que controlan todo, que mandan en todo, que influyen sobre todo
La periodista Thabata Molina reseñó el jueves pasado en El Universal que «después de desmantelar los campamentos de estudiantes desplegados en el municipio Chacao, varios grupos de manifestantes congregados en la avenida Uslar Pietri y en la Francisco de Miranda, en Altamira, fueron dispersados por los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.
«Los que no quieran patria tendrán plomo», gritaba uno de los uniformados de la PNB a un grupo de personas que pasaba por la calle y le reclamaban la acción represiva.
«Patria o plomo»… ¡Qué disyuntiva! Pareciera muy obvio escoger la patria… ¿pero de qué «patria» hablamos? ¿De la «patria» de Maduro?
¿Patria o «patria»? La «patria» de Maduro es la «patria» de la división, de la intolerancia, la del gas del bueno. Es la «patria» donde los soldados disparan contra su pueblo. La «patria» que ahuyenta a los jóvenes que no ven futuro y mata a quienes habiendo decidido quedarse aquí, pelean por tenerlo.
Es la «patria» de la corrupción desbandada, de los pingües negocios familiares, de las solidaridades automáticas. La «patria» de las instituciones secuestradas, de las manipulaciones de las leyes, de las interpretaciones que desafían la razón, de las historias falseadas y las conspiraciones inventadas. Es la «patria» de la mediocridad generalizada. Del adoctrinamiento. De la subyugación. Del revisionismo histórico. Es la «patria» donde se perpetúan la pobreza y la ignorancia como instrumentos de dominación.
Es la «patria» de la ranchización de todo. Es la «patria» de las expropiaciones que no se pagan, de la arbitrariedad, de las tomas forzadas, de la destrucción sistemática del aparato productivo, donde no se produce nada en las empresas tomadas. Es la «patria» de la inflación y la escasez.
Es la «patria» de la represión brutal y el odio sembrado. Es la «patria» donde los derechos humanos no existen, donde hay ciudadanos que se usan y ciudadanos que se descartan. Es la «patria» del abuso de poder, de las alcabalas, de los «bájate-de-la-mula-si-quieres-obtener-algo». Es la «patria» de quien ni siquiera sabemos si nació en Colombia o nació en Venezuela.
Es la patria, sin comillas, de los cubanos que controlan todo, que mandan en todo, que influyen sobre todo.
Si esa es la patria de la que habla el PNB, prefiero su plomo inmisericorde.
@cjaimesb