El venezolano Ronald Acuña Jr. logró uno de los hitos más difíciles de alcanzar en Grandes Ligas: se convirtió en el quinto jugador de la historia en ingresar al club 40-40. De hecho, creó su propia marca: es el primer pelotero de la Major League Baseball en batear 40 jonrones y robar 60 bases en una misma temporada.
Publicado en: Prodavinci
Por: Mari Montes
Ser parte del club de los 40-40 es tan exclusivo que sólo lo han logrado cinco peloteros en toda la historia del béisbol: José Canseco, Barry Bonds, Alex Rodríguez, Alfonso Soriano y, desde este viernes 22 de septiembre de 2023, Ronald Acuña Jr.
Para no distraer la importancia de la rareza que significa conectar 40 jonrones y robar 40 bases en una temporada, dejemos de lado los cuestionamientos de varios miembros en esa élite que logró combinar fuerza con velocidad y que están señalados por usar sustancias prohibidas. Lo cierto es que alcanzar ambas cifras es una tarea extraordinaria.
Literalmente, se cuentan con los dedos de una mano.
Nos referimos a 40-40 porque son los hitos. El de Ronald Acuña Jr. es único, con 40 jonrones y 68 bases robadas.
Lo que ha logrado en este 2023 confirma lo que hemos visto desde su debut en 2018, cuando llegó como el prospecto número uno de la Liga Nacional.
En su primera temporada, ganó el Novato del Año de la Liga Nacional, mientras que en la Americana ganaba Shohei Ohtani; no por casualidad dos de los jugadores más espectaculares de esta era, posibles ganadores del Jugador Más Valioso en sus respectivos circuitos.
Acuña Jr. más que sorprender, maravilla. Ratifica con creces los pronósticos que le precedieron a su llegada a las mayores. Literalmente, se cuentan con los dedos de una mano.
Ya en 2019, cuando se convirtió en el segundo jugador venezolano 30-30, estuvo a punto de ser un 40-40, pero una lesión se lo impidió y se quedó corto con las bases robadas. Bateó 41 jonrones y estafó 37 almohadillas.
En aquel momento, apenas 4 temporadas atrás, robar bases no era como en otros tiempos. Con los cambios en el béisbol, la jugada se hizo menos frecuente. Las estadísticas probaron que era prácticamente entregar un out, dado la cantidad de hombres capturados. La lista de corredores con “luz verde” se redujo; uno de ellos era Ronald Acuña Jr.
Este 2023, los cambios en el tamaño de las almohadillas así como limitar las veces que los lanzadores pueden tirar a las bases para “cuidar” a un corredor, favorecieron el robo de bases y lo rescataron como jugada ofensiva. Es un hecho que se ha incrementado en un 40.5% el número de bases robadas, pero eso no resta valor a lo que ha logrado el venezolano. Si ajustáramos la cantidad de bases que ha estafado esta temporada quitándole ese porcentaje de aumento, igual superaría las 40.
Ser un jugador con poder para llevar la pelota más allá de la cerca implica fuerza y, en muchos casos, son hombres fornidos y pesados para correr, aunque en esto también las cosas han cambiado. Con las nuevas técnicas de preparación física, encontramos que los jugadores son más atléticos y fuertes, sin tener que exhibir un cuerpo como el de una buena cantidad de jonroneros del pasado, que encajaban en la descripción clásica del “cuarto bate”.
Con las bases robadas, la condición atlética no es suficiente. Tanto antes como ahora, la capacidad de robar almohadillas no depende únicamente de la rapidez de las piernas; otros factores, como saber tomar el tiempo al lanzador, conocer las habilidades del receptor y el instinto, siguen siendo primordiales en el éxito de la agresiva jugada. Sumemos a esto que no es posible que cada vez que un hombre con estas habilidades llegue a primera, puede a salir a robar. Hay situaciones de juego que no permiten pensar en hacerlo, pitchers a quienes es riesgoso robarles, receptores que hay que respetar, o situaciones, como una buena ventaja sobre el rival, por ejemplo, que impiden o dificultan robar bases. Todo esto sin considerar que el primer reto consiste en embasarse. Lo que para el de La Sabana tampoco es una complicación.
Las 68 bases robadas de este 2023 lo ubican como el jugador venezolano con más bases robadas, dejando atrás a Roger Cedeño, quien en 1999 robó 66 cojines jugando para los Mets. El exjardinero se comunicó con Acuña, cuando lo igualó, para manifestarle su admiración y orgullo. Cuando lo pasó, le envió otro mensaje, a través del portal El Extrabase, felicitándolo por tener el nuevo récord para Venezuela.
Esta temporada de Ronald Acuña Jr. me hizo recordar a Francisco Cervelli en 2019. En aquella temporada, el careta jugó al final con los Bravos. Cuando Acuña quedó en 37 bases robadas, me dijo: “Eso no importa, él lo va a hacer. Él va a ser un 40-40, y no tardará en hacerlo”.
Acuña pertenece a la élite de Major League Baseball. Fue el jugador más votado para el Juego de las Estrellas, su camisa es la más vendida entre todos los jugadores de las Grandes Ligas.
Semanas atrás, Miguel Cabrera dijo sin dudar que él confía en que Ronald Acuña Jr. superará sus récords.
Cabrera fue el encargado de presentarlo en la edición anual de la revista Time, como una de las 100 figuras destacadas de 2023.
Usamos sus palabras para cerrar:
«Tiene grandes posibilidades de convertirse en el mejor beisbolista nacido en Venezuela de todos los tiempos. Es tan simple como eso. Pero Ronald es más que sólo sus estadísticas. Es el tipo de jugador por el que los aficionados pagan para ver jugar”.
