Mercedes Pulido de Briceño

Nunca he publicado un obituario en esta página. Lamentablemente, siempre hay una primera vez. La partida de Mercedes Pulido lo obliga.

Mari Montes público en las redes el hermoso y emotivo texto que sigue a continuación.

 

Por: Mari Montes

Mercedes Pulido de Briceño fue una de las mujeres venezolanas mas universales y brillantes de toda la historia, sí, toda nuestra historia. Visionaria, adelantada a su tiempo, se empeñó en hacer verdad la inclusión y la igualdad, de derechos y de oportunidades para todos.
La recuerdo fajada, junto a Sonia Sgambatti y Argelia Laya, en la reforma del código civil que abolió el estigma de «hijo natural» a los niños no reconocidos, para que tuvieran los mismos derechos que los nacidos dentro del matrimonio. Gracias a esa reforma, los hijos no reconocidos llevan los dos apellidos de sus madres, para evitarles discriminación por la irresponsabilidad paterna.
Fue parte de una Venezuela que se puso de acuerdo para cosas importantes. No importa lo que digan los mezquinos y los ignaros que pretenden escribir otra historia.
Fue motor fundamental en la continuidad del sistema de orquestas, en la expansión de los hogares de cuidado diario, que significó mejorar la calidad de vida de los niños, madres trabajadoras y madres cuidadoras. Mercedes motorizó programas de participación de la mujer en el desarrollo y en la proclamación de los derechos de los niños. Profesora y maestra siempre, en cada palabra, en cada entrevista. Tuve el inmenso honor de entrevistarla en programas de radio, desde «Adán, Eva y la Culebra» en Radio Capital Am y luego en Unión Radio. Cuando fui reportera en el congreso, escucharla en los debates era un placer y una cátedra. Brillante, amena, certera, valiente e iluminada, era para coger palco, literalmente. Su amistad fue un honor y una bendición. Una vez, cuando por abusos mi hijo Daniel Alvarez Montes tuvo que llevar ante la LOPNA a sus entrenadores de beisbol, ella me ayudó a redactar el documento que presentamos, la verdad lo escribió ella, que se conocía cada letra de la declaración universal de los derechos de los niños, porque ella fue firmante en la ONU. Dirigió la revista SIC del Centro Gumilla con tino y valentía. Lo de ocuparse de los menos favorecidos fue una causa en la que nunca desmayó.
Con un sentido del humor que evidenciaba su brillantez, Mercedes Pulido de Briceño siempre encontraba las palabras adecuadas.
Me entristece su partida, pero me alegra haberla tenido, haber contado con ella, como venezolana, como mujer y como amiga.
Ya debe estar con Dios, inventando algo para hacer mejor al cielo, diseñando un programa de excelencia  de cualquier cosa que pueda ser mejor. Todo fue mejor si tenía a Mercedes.
Inolvidable, querida, recia y dulce, ejemplar, inspiradora.
Me aflige que no esté cuando este horror termine.
Pero dejó alumnos regados por todos lados, a la hora de la reconstrucción, ella va a estar presente.

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8 comentarios

  1. Me deja pesar que no esté la profesora Pulido, creo que no hace ni dos semanas la oí por Unión Radio con Albany Lozada y Ramon Pasquier.. Brillante

  2. Mujer que queda en la memoria de quienes la conocieron aunque no sea personalmente, la recuerdo como la ministro de la inteligencia en el gobierno de Luis Herrera.

  3. Una gran mujer, para mí ella y otra Mercedes la profesora Mercedes de Di Vora, son las mas brillantes de las venezolanas; lástima que se fue antes de ver la reconstrucción, pero su espiritu nos guiará.

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